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jueves, 3 de diciembre de 2015

RAFAEL SUBIETA, COMPROMETIDO CON SU PROFESIÓN


Rafael Humberto Subieta Tapia es abogado de profesión y tiene 27 años. Durante la gestión 2014-2015 fue el único boliviano que obtuvo la beca Chevening para estudiar un Máster (LL.M.) en Derecho Internacional de Derechos Humanos en la Universidad de Essex (Inglaterra). Ahora ya retornó al país y trabaja en ONU Mujeres (Bolivia).

Cabe destacar que la beca Chevening es el programa global de becas del Gobierno del Reino Unido, financiado por la Cancillería Británica y organizaciones asociadas. Chevening permite estudiar un año de maestría en cualquier universidad del Reino Unido a líderes emergentes que se han destacado académicamente en sus respectivas áreas.

¿Cómo fue que obtuviste la beca Chevening?

El proceso de selección consistió en una primera etapa de aplicar en línea tanto a la beca Chevening como a las universidades mediante ensayos de motivación, notas académicas, experiencia profesional y referencias. En esta etapa, Chevening Londres elaboró una lista de preseleccionados con el asesoramiento de expertos en cada área de estudio.

Posteriormente, la Embajada Británica en La Paz redujo aún más la lista de preseleccionados en base a los requerimientos del país, invitando a los candidatos a una entrevista en las oficinas de la embajada. Posterior a la entrevista, el panel de entrevistadores tomó la decisión de otorgarme la única Beca Chevening que el año 2014/2015 existía para Bolivia. (Ahora el número de becas se elevó a 10).

¿Qué consejos das a jóvenes profesionales que realizan postgrados en el exterior?

Que pierdan el miedo y confíen en sí mismos. La educación boliviana tiene un alto nivel y si han sido lo suficientemente audaces como para aceptar el desafío que significa estudiar en el extranjero, ya tienen el perfil necesario para conseguir el éxito.

Coméntanos qué maestría estudiaste.

Estudié la maestría (LL.M.) en Derecho Internacional de Derechos Humanos en la Universidad de Essex, especializándome en litigio ante tribunales regionales e internacionales. El programa de maestría que cursé es uno de los más reconocidos internacionalmente, siendo el número uno en Europa y uno de los tres mejores a nivel mundial. Los docentes encargados de la cátedra son expertos en la materia, ocupando posiciones como relatores especiales de ONU, miembros del Comité de Derechos Humanos en Ginebra y litigantes ante la Corte Internacional de Justicia, Corte Penal Internacional y Sistema Interamericano de Derechos Humanos.

¿Cómo te ayudó esta experiencia a crecer como persona y como profesional?

Como profesional, la experiencia abrió mi mente a nuevas ideas y prácticas del Derecho, las cuales en Bolivia son en muchos casos desconocidas. Al ser un programa intensivo y muy práctico, mejoré mi calidad de abogado litigante y elevé mi perfil como profesional al posicionarme como uno de los pocos especialistas en esta área en el país. Como persona, definitivamente crecí, conocí nuevas culturas, pude relacionarme abiertamente con personas relevantes de distintas partes del mundo y aprendí de ellos. El vivir y estudiar en un país extranjero te enseña a diario sobre la vida, las personas y uno mismo.

¿En qué caso o situación que está atravesando Bolivia aplicarías los estudios que realizaste en Inglaterra?

Bolivia, al ser parte de distintos tratados sobre derechos humanos, tiene la obligación de cumplirlos, así como seguir los estándares fijados por tribunales internacionales en todos los actos, sentencias judiciales, leyes, etc. que de manera interna existan en el país. Por ejemplo, un juez boliviano no puede apartarse de los criterios contenidos en las sentencias emitidas por la Corte Interamericana de Derechos Humanos, de hacerlo existen acciones legales en la legislación boliviana para corregir ese hecho. De igual manera, las leyes bolivianas deben cumplir con lo expresado en los tratados sobre Derechos Humanos, pues de no hacerlo serían contrarios a Convenciones y a la misma Constitución Política del Estado, que incluye a los tratados de derechos humanos dentro del bloque de constitucionalidad. Si los recursos legales bolivianos interpuestos no han subsanado la violación de la Convención, se puede recurrir a tribunales internacionales para declarar responsable al Estado, corregir en lo posible la violación y compensar a las víctimas. Lo aprendido en la maestría puede ser utilizado asesorando de manera preventiva o representando a las víctimas de violaciones de derechos ante tribunales nacionales e internacionales.

¿Cuáles son tus planes a corto y largo plazo?

A corto plazo, estoy enfocado en un proyecto de ONU Mujeres sobre impulso y seguimiento de casos penales de feminicidio en Cochabamba. Posteriormente, estaré fundando una firma legal internacional que asesore en temas constitucionales, penales e internacionales. El plan a largo plazo es llevar esta firma a nivel nacional y expandirla a nivel internacional.

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